Desde hace tiempo, este tipo tiene contratada a una pelirroja que se encarga de hacerle recados y darle consejos de todo tipo, como por ejemplo en los cuadros que suele comprarse para su casa. Ella está para todo lo que necesite, por lo que podemos concluir que es bastante sumisa con su jefe. De hecho, una tarde lo demostró dejando que vendase sus ojos y la sometiese en un polvazo casero, donde terminó a cuatro patas y gozando de los pollazos que le acabó metiendo en el suelo.