Tras apuntarse a clases de cocina, esta pelirroja vio que el profesor encargado de enseñarla era un tipo cachas y tatuado, al cual no paraba de mirar en todo momento. Decidió seducirle con su cuerpazo joven y terso, hasta terminar desnuda y deseando probar su rabo junto a la mesa. El tipo no dudó en seguirle la corriente a su guapa alumna, hasta darle a probar su rabo un buen rato con una sesión de sexo duro brutal.