Mientras paseaba por la calle, esta rusa tetona vio como un desconocido se le acercaba y le hacía una propuesta. Estaba empeñado en verle las tetas y ella, al principio se quedó un poco sorprendida con la oferta. Pero cuando vio el fajo de billetes que estaba dispuesto a darle, no solo se las enseñó, sino que se fue con él a un lugar donde no pudieran pillarles y terminó bajándose las bragas, para dejarle penetrar su chochito en un polvazo al aire libre.