Tras llegar a casa los dos del trabajo, parece que se dispusieron a marcarse un buen polvete casero. Pero la novia china de este chaval quiso ponerle un poco de picante al asunto y al final, le pidió que lo grabase todo con una cámara. Él no se esperaba esa petición, pero acabó siguiéndole la corriente y terminaron dándolo todo en un vídeo casero. Para que luego digan que las asiáticas son chicas tímidas y muy reservadas…