A esta chica se le notaban los nervios ante su primer casting porno, mostrándose muy tímida y recatada. Tras firmar todo el papeleo se quitó la ropa y poco a poco se fue relajando, mientras tocaba su coño para entrar en calor. Cuando ya al fin tuvo un buen rabo a mano, olvidó sus temores y se centró en disfrutar, algo que está claro que acabó haciendo, ya que sus gemidos y su cara de placer se notaron en todo momento.