Parece que Julia Ann buscaba a una chica de confianza que cuidase de su casa y limpiase de vez en cuando, hasta que al fin encontró a la guapa Aidra Fox. Ella le prometió ser muy eficiente, pero parece que la madura no estaba muy atenta a lo que decía, ya que solo tenía ojos para el cuerpazo de la jovencita. Pronto se empezó a notar que estaba muy caliente, metiéndole mano y acariciándola en el sofá, hasta que finalmente las dos se quitaron la ropa y acabaron sucumbiendo a ese calentón con una follada lésbica juntas.