Aunque se supone que iban a estudiar, la sexy Gina Valentina no pudo evitar golfear nada más ver a su chico y lo hizo recibiéndole en ropa interior. Fue imposible negarse ante una brasileña tan caliente como ésta y pronto, terminaron en la cama. Se olvidaron de los libros y de sus tareas, pasando directamente a la acción y disfrutando de un polvete casero bestial. Y es que cuando a esta golfa latina se le mete algo entre ceja y ceja, no para hasta conseguirlo.