Aprovechando que su padre es ciego, la joven tetona Codi Vore quiso darse un capricho y pedir por correo un nuevo consolador sin que él se entere del contenido del paquete. Estaba deseando probarlo y cuando el repartidor se lo llevó a casa, la chica fue a la ducha a probarlo. Lo que pasa es que mientras se masturbaba, el tipo empezó a espiarla ya que se quedó flipando con sus tetazas, hasta que fue pillado in fraganti por la rubia. Al ver lo cachondo que lo tenía, decidió tirar su nuevo consolador y como vemos, prefirió aprovechar para probar una polla de verdad y follárselo en medio del baño y en el dormitorio, acabando así con su calentón.